lunes, 14 de marzo de 2011

Todo un capullo


Por algo yo te insistía en hablar,
en conocernos tranquilamente,
y así sin prisas contarte sobre mí,
para que no te pillara de susto…
y supieras reaccionar.

Pero tú no querías perder tiempo,
para poder conocernos enseguida,
nos estábamos haciendo ilusiones,
pero nos estábamos apresurando,
y derrapaste en la primera curva.

¡ESTO ES LO QUE HAY!,
como decirte todo lo que me alegro,
de haber descubierto con tiempo,
¡QUÉ ERES TODO UN CAPULLO!,
y que no me vas a hacer sentir mal.

Alas negras

No hay comentarios:

Publicar un comentario